Si así es, estoy hasta el vil queque (léase maldita refregada), porque nomás no encuentro un lugar decente para comer; y de los seis o siete lugares que hay por estos aires ya me aburrí;
no salen de las famosas quecas, sushi, tacos, lonchibon, saludables, maruchan, etc.
y en el único lugar que aún me parecía apetecible, saludable y económico (bonito y barato pues), resulta que hay bichos del tamaño de mi hámster -bueno, no tengo hámster pero algún día lo tendré-.
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waaac, booooc
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(estoy guacareando, ok?)
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waaaaaaaaaaaaa!!
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(llamando al monstruo del pantano, llamando al monstruo del pantano!!)
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buuuuuuuuuuuuaaaaaaaaac!!!!
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uuf! Odio a las cucarachas con odio jarocho (cómo es el odio jarocho?)...
Así que cuando llegue al poder, acabaré con todos los bichos sobre la tierra, bueno, sólo los de mi rancho, ara no afectar el ecosistema, sí o no soy comrensiva desués de todo? (Y si no no me importa)... Cáiganle.
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waaaac!!!
