Enero 6, 1997.

-¡Mira, los Reyes me trajeron una Barbie y una pelota! (Si, una pelota, porque los Reyes no tenian para regalarme un balón de voly, lo que más me gusta jugar... no importa, nunca me han traido lo que les pido pero termina agradandome mucho más, debe ser el detalle).

-Jaja, a tus ya 13 años y todavía te traen muñecas.

-Mire apá, ¡a usted le trajeron unos calcetines!

-Si, muchas gracias… Saben, no me siento bien, se me dificulta mucho la respiración… vengan todos, quiero que estemos juntos.


…


-¡Papá, ¡¿qué tiene!? Respóndame, papá, hábleme, ¿qué le pasa?

-Ve a buscar a Juan y Beatriz!!

-¿Qué pasa?

-Mi papá, no responde no se que tiene, ¡no puede respirar!

-¡¡Papá!!... papá!!!!!


…



Hace ya 9 años que mi papá falleció, tan de repente y tan impredecible, siempre se curaba y volvía a recaer, esta vez ya no hubo cura. Murió en casa, frente a mis incrédulos y estúpidos ojos, nunca quiso morir en un frío hospital.

Pero aún en vida solo cargaba con el cuerpo, comenzó a agonizar desde que mi madre murió casi cinco años atrás. Padre de 6 hijos, 2 fallecieron siendo apenas bebés. Curiosa la vida… o la muerte. Se ha llevado ya a la mitad de nuestra familia.

Todas las veces en que hayas besado y abrazado a tus seres mas amados nunca llegan a ser suficientes cuando ya no están.

Te amo papá.